Seguridad infantil en ventanas - My CMS
Si tienes niños en casa, una de las principales preocupaciones es la seguridad. Existen multitud de riesgos a los que un pequeño está expuesto en casa.
La seguridad infantil es imprescindible porque los niños son inquietos y extremadamente curiosos. En su interés por explorar pueden sufrir accidentes o caídas.
Tu responsabilidad como padre es minimizar las consecuencias de cualquier incidente que pueda ocurrir.
Para ello tendrás que tomar una serie de precauciones como vallar las escaleras, tapar enchufes, protectores de esquinas, anclaje de muebles…
Nosotros te contamos a continuación, 3 consejos de seguridad infantil en ventanas.
1. Instala seguros
Si vives en una casa o piso a cierta altura, uno de los miedos más comunes es que los niños abran las ventanas.
Aunque lo mejor sería que no puedan acceder al mecanismo de apertura. Este no es un objetivo muy duradero, porque a medida que crezcan conseguirán alcanzar con más facilidad las ventanas.
La forma de evitarlo es asegurando las ventanas. Hay una gran variedad de mecanismos de seguridad infantil: seguros de cerradura con llave ideales para que los más pequeños no abran las ventanas y para los posibles intrusos) o puedes optar por sistemas más sencillos.
Con ellos, impedirás que se abran más allá de lo dispuesto, su instalación es sencilla y son muy versátiles para toda clase de ventanas.
2. Elige vidrios de seguridad
El vidrio de las ventanas suele ser un elemento frágil con el que hay que tener cuidado. Si se rompe puede provocar caídas, impactos o golpes. Y no olvidemos que se trata de cristal y puede provocar cortes.
Existen en la actualidad una variedad de vidrios diseñados para aumentar la seguridad de las ventanas.
Los más adecuados son los vidrios laminados que protegen la integridad física de los usuarios en caso de rotura. El vidrio se queda adherido a una capa interior de PVB (Butiral de polivinilo), y así los pedazos afilados no salen despedidos. También son vidrios que te protegerán de ataques intencionados.
Otro tipo de vidrios de seguridad son los templados. Suele prescribirse por la resistencia mecánica que proporciona.
Si se rompe tras un fuerte impacto, el vidrio queda reducido a la mínima expresión para no causar daños.
Ponte las pilas con la seguridad infantil de tus ventanas y ten la tranquilidad de que los niños no correrán ningún riesgo. Contacta con profesionales como ventanas Gorriti y no te la juegues.